Las Emociones: Qué son, Características y Teorías
Las emociones representan fuertes sentimientos hacia alguien o algo, suele incluir la experiencia subjetiva y consciente, caracterizada principalmente por expresiones psicofisiológicas, reacciones biológicas y estados mentales.
En algunos usos de la palabra, las emociones representan fuertes sentimientos hacia alguien o algo. Los sentimientos emocionales pueden operar en la conciencia fenoménica con poco o ningún contenido cognitivo. La noción de sensación emocional como una fase de un proceso neurobiológico es consistente con la idea de que las emociones pueden ser percibidas y registradas en la conciencia fenoménica y en niveles más bajos de conciencia sin ser percibidas.
Sin embargo, otras teorías argumentan que las emociones existen por separado y pueden preceder a la cognición. En psicología y filosofía, la emoción suele incluir la experiencia subjetiva y consciente, caracterizada principalmente por expresiones psicofisiológicas, reacciones biológicas y estados mentales. Las emociones son estados psicológicos biológicos causados por cambios neurofisiológicos, asociados de diversas formas con pensamientos, sentimientos, respuestas conductuales y el grado de placer o desagrado.
Las emociones no solo reflejan nuestro estado mental, sino que también cambian la química y el funcionamiento de nuestro cuerpo. Las emociones también pueden incluir reacciones corporales, como cuando tu corazón late porque te sientes excitado, y movimientos expresivos, incluidas expresiones faciales y sonidos, como cuando dices «wow» porque algo te fascina. Una emoción puede tener un fuerte acompañamiento físico, como una expresión facial, o ser invisible para los demás.
Técnicas para reconocer y comprender las emociones
Hay varias formas de comprender las emociones. Conocer tus emociones puede a ayudarte a identificarlas entre otras y mejorar tus interacciones con todas las personas que conozcas. Una comprensión completa de las emociones incluye comprender por qué las emociones son parte de la vida. Parte del desarrollo de la conciencia emocional es aprender otras formas de expresar las emociones.
En terapia, las personas pueden aprender a reconocer cuándo las emociones afectan su juicio y mantener esas emociones bajo control disminuyendo la ansiedad. Si siente que tiene un problema de ira, un terapeuta puede ayudar a desarrollar herramientas efectivas para lidiar con estas emociones. Incluso las personas sin un diagnóstico clínico pueden sentirse abrumadas por las emociones.
Las emociones rara vez son unidimensionales, y es natural saber que sientes algo, pero no puedes expresarlo con palabras
Experimentar emociones es la forma en que tu cuerpo transmite información a tu mente. Un ejemplo es el componente fenomenológico (sentimiento) de una experiencia emocional no etiquetada y, por lo tanto, no articulada, un sentimiento que sabes que tienes pero que no puedes identificar o describir específicamente. Los procesos sensoriales asociados con sentimientos emocionales como la alegría, la tristeza, la ira y el miedo pueden representar los prototipos de las experiencias emocionales.
Los académicos que apoyan esta visión de la emoción también creen generalmente que las diferencias entre emociones como la ira y el miedo, que son tanto negativas (baja valencia) como altamente excitadas (alta excitación), se derivan de nuestras interpretaciones de los eventos reales que ocurren y no de experiencias emocionales específicas, como en la película «Inside Out». Algunas emociones negativas básicas (p. ej., tristeza, ira, miedo) son inherentemente difíciles de estudiar en el laboratorio. Las emociones también se pueden experimentar en diferentes niveles de intensidad, de modo que los sentimientos de ansiedad representan una variante de baja intensidad de la aversión a la emoción subyacente del miedo, mientras que la depresión es una variante de mayor intensidad.
Las personas también pueden aplicar sanciones positivas o negativas dirigidas a uno mismo o a los demás, que también provocan diversas experiencias emocionales en las personas. Por ejemplo, cuando sentimos miedo, nuestro sistema nervioso simpático se activa.
La teoría más simple de la emoción, y quizás la teoría más representativa del sentido común, es que las emociones son simplemente una clase de sentimientos que difieren en la calidad experimentada por otras experiencias sensoriales, como el sabor del chocolate, o por propiocepción, como la sensación de dolor en el costado o la espalda. Si las emociones fueran solo sentimientos, como sugirió William James, sería difícil explicar por qué podrían justificarse a la luz de las razones, al igual que sería difícil justificar la experiencia sensorial de probar el chocolate o el dolor en la espalda baja. Una teoría es que experimentamos cinco o seis tipos diferentes de emociones, como la ira y la diversión, y que cada emoción es completamente diferente de las demás.
Una emoción puede implicar una experiencia y una reflexión conscientes, como cuando te «hundes» en ella, o puede pasar desapercibida y no reconocida por el sujeto. La emoción puede ser profunda, es decir, necesaria para la supervivencia física o la salud mental, o puede ser mundana o disfuncional.
La tristeza se puede asociar con un evento específico, como una pérdida o un rechazo
También puede ser socialmente vinculante, como sentir remordimiento después de cometer un delito o sentir dolor en un funeral. La tristeza se puede asociar con un evento específico, como una pérdida o un rechazo.
Los pensamientos y las emociones están estrechamente relacionadas y pueden experimentarse juntas, pero son distintas. Las tradiciones sensoriales consideran cómo se sienten las emociones como su característica más esencial y definen las emociones como experiencias conscientes distintas.
Las interacciones dinámicas (que van desde procesos momentáneos hasta rasgos o fenómenos similares a rasgos) pueden dar lugar a innumerables experiencias emocionales específicas (por ejemplo, patrones de ira) que comparten el mismo estado emocional central pero diferentes tendencias perceptivas (prejuicios), pensamientos y planes de acción. También se ha sugerido que las emociones (afecta la heurística, los sentimientos y las reacciones internas) a menudo se usan como atajos para procesar información e influir en el comportamiento. Los sentimientos pueden predecir el efecto de estímulos futuros al anticipar la relación entre crisis futuras y experiencias y necesidades emocionales posteriores, como peligro, miedo, seguridad o pérdida, tristeza y apoyo social.