Sentirse Atascado

Sentirse atascado, el estado de estancamiento es un estado en el que no puedes mantenerte en contacto con los sentimientos y emociones más verdaderos.

Atascado

¿Cómo podemos saber si estamos atascados?

Te ponemos una lista para que en caso de que lo estés, puedas identificarte:

  • No tienes motivación. No quieres complicarte y lo haces todo de forma mecánica sin pensar mucho en ello.
  • Evitas los desafíos. Cuando existe un reto o una nueva situación, prefieres no interferir. No ves ningún sentido ponerte a prueba.
  • Tienes una rutina muy estructurada. Haces siempre lo mismo de la misma forma.
  • No te gusta las novedades. Cualquier nueva situación es inoportuna e innecesaria, en la que no es nada productivo invertir esfuerzo con el objetivo de adaptarse.
  • Te justificas siempre y puedes incluso mentir. Inventas constantes excusas para justificar tu inactividad.
  • No quieres comprometerte con nada. Cumples simplemente con tus propios requisitos, ya sea en el trabajo o a nivel personal. Pero no quieres involucrarte demasiado.
  • Sientes fatiga la mayoría del tiempo. Te sientes sin energías continuamente, siempre cansado, sintiendo tu cuerpo pesado y estando en una continua somnolencia.

Soluciones al estancamiento:

  1. Enfrenta tus miedos: A menudo dejamos que el miedo, la preocupación y la inseguridad gobiernen y definan nuestras vidas. Les permitimos robar diversión, sueño y nuestra fantasía más preciada. Si deseas alcanzar la felicidad debes estar preparado para dar un salto de fe y enfrentarte el miedo.
  2. Rompe con tu rutina: es importante romper con la rutina, recuperar el dinamismo y hacer tu vida más agradable y divertida. Para que te sientas bien y además tengas energía y motivación para afrontar los obstáculos.
  3. Comienza a hacer cambios, pero solo un paso a la vez: no te amontones, poco a poco.
  4. Supera la percepción de imposibilidad: no creas que algo es imposible de conseguir, si te planteas ese pensamiento el que se está poniendo barreras eres tú mismo.
  5. Se honesto contigo mismo: debemos hablar con nosotros mismos, lo primero que debemos hacer es centrarnos en nosotros mismos y dejar de lado todos los estímulos que dificultan nuestro progreso. Desconecta de todo, date tiempo para pensar y escucha realmente lo que te dices a ti mismo, no lo que pensamos que queremos decir o lo que queremos escuchar. Escuchémonos sin miedo, no nos regañemos, valoremos y consideremos lo que realmente pensamos, sentimos y queremos, y dejémonos ser nosotros mismos.
  1. Cambia tu perspectiva: cambia la ventana por la que ves el mundo. Aceptar y pensar en diferentes perspectivas es una parte importante del desarrollo personal en la vida.
  2. Diferencia entre sentimientos y realidad: Cuando hablamos de realidad, nos referimos a lo que podemos percibir objetivamente a través de nuestros sentidos, la realidad no es una interpretación subjetiva de nosotros. Las diferencias pueden determinar cómo nos sentimos, y es muy importante considerar esto.
  3. Evita culpar a los demás: no culpes a los demás, aunque de verdad sea su culpa, esto no nos ayuda en nada y nos intoxica para buscar una solución. Solemos achacar nuestros fracasos a otras personas o a situaciones adversas, debemos tener muy presente que en el mundo estamos todos, con nuestras virtudes y defectos, con situaciones a veces favorables y otras desfavorables, en la que muchas veces fracasamos y unas pocas salimos victoriosos, por lo que todos partimos con las mismas reglas del juego.
  4. Deja de compararte con los demás: el jardín del vecino siempre es más verde. Nunca te compares con los demás porque lo que vemos de los demás es la punta de iceberg y además lo que ocurre en las comparaciones es que infravaloramos nuestras capacidades y exacerbamos el valor de la otra persona. También compararte con otros que lo están pasando peor para sentirte mejor tampoco, lo único que hace es frenar tus ambiciones. Si quieres compararte con alguien que sea solo con el objetivo de mejorar personal y profesionalmente.
  5. Deja de poner excusas: HAZLO YA. El mañana siempre es mañana y el pasado ya ha pasado, lo único en lo que tienes control es en el ahora, ¿a qué esperas para ponerte a ello?